La agrupación de Sevilla de Ciutadans-Partido de la Ciudadanía (C's) ha salido hoy en defensa del ex coordinador de la federación de Andalucía Occidental de C's Mario Acosta, expedientado esta semana por la dirección del partido por sus críticas y denuncias internas en los últimos días. En un comunicado, la agrupación sevillana de C's niega que Acosta tenga abiertos con anterioridad dos expedientes disciplinarios, como afirmó la pasada semana el presidente del partido, Albert Rivera, y recuerda que la dirección de Ciutadans "nunca le había notificado expediente sancionador alguno". La rama de C's en Sevilla también niega que Acosta haya "filtrado" a la prensa información relativa a la crisis interna en el partido, sino que "se ha limitado a efectuar unas declaraciones a la prensa, en el ejercicio de su derecho de libertad de expresión garantizado en el artículo 20 de la Constitución Española". Petición de rectificación También niega que dichas declaraciones críticas tuvieran como causa "una pataleta de Acosta por no permitirle presentarse a las elecciones municipales". "Acosta no figuraba en la lista que la agrupación de Sevilla había confeccionado de forma democrática para la candidatura de Sevilla. Es más, dicha lista fue aprobada por el secretariado permanente de la Federación Resto de España y fue enviada a la ejecutiva del partido para su aprobación definitiva. La lista por Sevilla la encabezaba Antonio Albert Matea", recuerda en el comunicado. La agrupación ha solicitado al comité ejecutivo de C's que "rectifique" su actitud contra Acosta, ya que "en caso contrario, la imagen de Acosta y de la agrupación a la que pertenece se vería gravemente dañada por las declaraciones inciertas vertidas por la dirección del partido". "Queremos manifestar nuestro apoyo y solidaridad con nuestro compañero y excoordinador Mario Miguel Acosta Jurado, que continúa perteneciendo a nuestra agrupación como afiliado de base con plenos derechos, pues el partido hasta la fecha no nos ha notificado ninguna suspensión temporal de militancia", concluye. Precedentes de la crisis Este nuevo foco de crisis interna en Ciutadans en medio de la campaña electoral se suma al producido tras la suspensión de militantes en Cerdanyola del Vallès, la localidad donde Ciutadans cosechó su mejor resultado electoral en las autonómicas de noviembre pasado. Los sancionados eran dos militantes críticos con la dirección del partido. Ambos, junto con una docena más de afiliados recibieron el jueves pasado en Cerdanyola al presidente de Ciutadans, Albert Rivera, con una pancarta que decía Lista corrupta, no. Denunciaban de esa forma las irregularidades en el proceso de confección de la candidatura municipal del partido en la localidad. En la misma reunión de la dirección en que se decidieron esas sanciones fue suspendido de militancia el excoordinador del partido en Sevilla, acusado de haber desvelado que el secretario general, Antonio Robles, había decidido dimitir tras las municipales por discrepancias con Rivera. Se ha publicado en El Periódico |