En cambio, muchas de las decisiones del Consejo general son ninguneadas por el presidencialista Comité Ejecutivo. Por ejemplo, debido a las múltiples irregularidades detectadas en muchas de las listas que presenta el Partido para las próximas elecciones municipales, el Consejo General se reunió el pasado día 21 para debatir acerca de qué listas deberían ser anuladas.
Pese a que todavía quedaba margen para la presentación de las listas, y pese conocerse perfectamente la finalidad de la reunión del Consejo General, alguien fue a presentar el listado definitivo a la Junta Electoral el día 20 de abril. Todo un ejemplo de respeto hacia las decisiones que tendría que adoptar al día siguiente el Consejo General.